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lunes, 4 de mayo de 2015

Bayern de Llagostera

Buenas tardes, queridos. Normalmente, la persona que lee mis posts (independientemente de que, tras una lectura previa, me ponga a parir) es un joven o adulto, de nivel cultural medio, interesado por el mundo del Betis y lo que en él acontece. Sin embargo, tras las últimas críticas y sinsentidos vertidos por aquí, me veo obligado a modificar la redacción de cierta parte de mi escrito de hoy, optando así mismo por bajar un poco el nivel de dificultad de la lectura, con el fin de que se comprenda de forma nítida.

Antes de nada. No he empezado todavía, eh. Querido lector, espérate. Bien, ahora sí. No quiero que echen a Mel. No quiero. Que no, ¿eh? Mel lo ha hecho mucho mejor que Velázaquez. Velázquez es caca del culo, pis, moco y pedo. Mel ha ganado muchos partidos. Yo admito que ha ganado y que ha mejorado al equipo mucho. Lo admito. Mel ha ganado. Mel ha mejorado. Mucho. Y es mejor que Velázquez, que es malo. Malo, malísimo. ¿Lo repito, o más o menos va bien así?

Perdonen que les haya hecho leer la chorrada que precede a estas líneas, pero es que parece ser que, como no lo exprese así, no hay forma, oye. Como incidas en el más mínimo detalle negativo de mi querido escritor, la turba te acusa de negar todas las afirmaciones a las que he procedido anteriormente. Porque claro, tú toca a Mel y ya no es que no sepas de fútbol, es que directamente te quitan el carnet (no, no es broma, algunos sujetos siguen manteniendo que no eres un buen bético si no tienes una estampita del madrileño en la cartera). Eso es lo que, desgraciadamente, está de moda en el beticismo.

Bien, a lo que íbamos. Créanme que, tras el esperpento perpetrado en el Villamarín el sábado, podría redactar una biblia de aspectos técnicos que criticar; los cambios, la misma alineación, las reacciones al gol, la actitud tanto de los jugadores como del entrenador. No es para menos, cuando nos empató en nuestro campo todo un Bayern de Llagostera. Sin embargo, como esta cantinela os la sabéis ya de sobra, quiero centrarme en una cuestión muy, pero que muy preocupante, y que me abordó los minutos posteriores al bochorno del otro día.

La cosa es, y voy a entrar directamente, que oí decir a muchos béticos, que jugamos bien. Contra el Llagostera. Contra el todopoderoso Llagostera, contra el que no obtuvimos más de un mísero punto. Que el Betis no hizo un mal partido, cuando no nos cayeron más goles Dios sabe por qué. Y lo peor de todo es que no lo decían bajo ningún estado de embriaguez o inconsciencia, no, no, lo decían completamente en serio. Y creo sinceramente que ese apego y esa defensa exacerbada de Mel empieza a causar graves estragos en la percepción del bético de a pie.

Mira, que te meta dos goles en tu campo el Barcelona, pues lo entiendo. Pero, ¿el Llagostera? ¿En serio, tío? ¿Jugando tú en casa, peleando por subir a Primera División, y habiendo ascendido este año el otro desde Segunda B? ¿Y encima tienes la desfachatez de afirmar que se ha hecho un partido correcto? No, tío, no. Lo siento, pero por ahí no puedo pasar. Porque a ver si nos enteramos que somos el Betis, y como Betis que somos, tenemos que meterle cuatro. Porque el contentarse con el empate es darle la razón a los de la acera de enfrente cuando nos llaman criaturitas y mascotas. Sí, sí, esos mismos que esta semana juegan unas semifinales de UEFA.

Lo peor es que lo justifican diciendo "es que es un rival difícil", y en ese punto, no sé si reírme o llorar. Son los mismos que afirman sin ningún tipo de pudor que en Mendizorroza se hizo una buena labor. Esos mismos a los que les recuerdas que nos humilló el Leganés en ambas vueltas, o que contra el Albacete perdimos cinco puntos (aquí hay que repartirle también a Velázquez). Y es que les da igual. Porque el veneno del conformismo, de la desidia, de hacer la ola con dos a cero en Segunda, campa a sus anchas por Heliópolis, y se ha instalado de forma permanente. No porque no pueda cambiarse, sino porque, básicamente, a la gente no le da la gana. Tristísimo.

¡¡Un saludo!!

@josearquer95
@lajuezaesbetica