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jueves, 26 de febrero de 2015

A todos esos... Capítulo 2.

Cuando escribí la primera entrega de este tema, imaginaba que en algún momento tendría que continuarlo, ya que es una cuestión la presente que abarca numerosos (y bochornosos a lo sumo) campos dentro del Real Betis Balompié en particular y el fútbol en general, y no se acabaría con la manipulación de diversos medios. Pero no sólo no esperaba tener que redactar este post tan pronto, sino que ni yo, ni los espectadores que acudimos atónitos a esta situación, pensábamos que iba a tomar este rumbo.

Muchas cosas han pasado en los últimos días. Tras la oleada de basura mediática expulsada por los medios que ya comenté en la anterior entrega, le dio por entrar a la famiglia que preside y defenestra a su vez nuestro fútbol. No contentos con el acto circense de la semana, consistente en meterle cuatro partidos de sanción a Ramis y El Arabi simplemente por tener un encontronazo durante el partido, les dió la picá de introducir sus podridos tentáculos en el caso Betis, y, con el vídeo del dichoso cántico (del que hablaremos posteriormente), sugirieron nada más y nada menos que el cierre parcial del Benito Villamarín.

Bien, señor Tebas. Cierre usted el Gol Sur del Benito Villamarín. Total, qué más dará castigar a más de cuatro mil personas por la acción de unos pocos desahuciados mentales. Total, qué más dará que en el Camp Nou, en Mestalla, en el Bernabéu, en Cornellá, en San Mamés, en el Pizjuán, etc. se hayan emitido gritos similares. Total, qué más dará que los ultras del Atleti hayan matado a una persona, ¿no? Porque en ninguno de esos casos ha pedido ni cierres parciales ni leches, ¿no? Porque si se trata de cerrar campos, sólo nos acordamos de los pobres desgraciaditos del Betis. Como son simpáticos, les colamos el puro y a otra cosa. Si la burocracia futbolística ya andaba en niveles mínimos en las últimas semanas, con este tipo de acciones se retratan casi de forma definitiva.

A la vergonzosa acometida de la prensa capitalina se unió ayer el amigo Carlos Arguiñano. Generalizando, para variar, con toda la afición y el estadio. Qué facil es despotricar de los maketos, que diría tu colega Sabino Arana, ¿eh, Carlos? Está muy bien hablar de nosotros cuando en tu programa (del cual debo confesar que hasta ayer era asiduo) te ponías fino haciendo chistes machistas de mujeres infieles, que no saben aparcar, etc. Y está mejor aún cuando en el estadio de tu amada Real Sociedad y en el de su vecino Athletic se entonan consignas a favor de la peor basura que ha corroído nuestro país en los últimos cincuenta años. Lo que comúnmente se llama ETA. Este tema sobre el que tú siempre has preferido callar, ¿a que sí?

¿Recuerdan lo que les he dicho antes de la prueba de vídeo que han recogido los mindundis de Antiviolencia? Es un taco de graciosa. Sobre todo, teniendo en cuenta que está más polioperada y retocada que la Esteban. ¿No se han fijado? Qué curioso que suene tan claro y nítido, y que en el videomarcador se observe la letra del himno, ¿no creen? Porque el himno del Betis es el momento más solemne de cada jornada para nuestra afición. De esos en que todos cantamos juntos. ¿No es extraño que se oiga tan claro cuando los Supporters (a los cuales saben de sobra que les profeso una simpatía muy escasa) son de los pocos en cantar el himno completo? ¿En serio creyeron que una manipulación tan extraordinariamente burda no se acabaría descubriendo? Por cierto, digno de mención también que el que subió las imágenes ya las ha borrado de Youtube. Todo curioso.

No todo es negativo, por raro que esto pueda parecer. Entre todo el fangal, destaca un elemento, especialmente desde el día de ayer. Siendo algo zafio, puedo afirmar sin complejos que los huevos del señor Juan Carlos Ollero, presidente del Real Betis Balompié, no caben en el Benito Villamarín. Brillante en la rueda de prensa de ayer. Simplemente soberbio. Le dio lo suyo al maketo Arguiñano, al corrupto de Tebas y resto de amiguetes, defendió al beticismo y puso los puntos sobre las íes como no había visto hacer a nadie desde (y perdonen el ejemplo) José María del Nido. Así sí, hombre. Sepa usted, don Juan Carlos, que desde las declaraciones de ayer, posee usted mi mayor respeto y admiración, y seré el primero en aplaudirle, si se hace (eso espero) la semana que viene en el Villamarín.

¿Qué pasará a lo largo de las próximas semanas? No podemos saberlo. El carácter discrecional e imprevisible de los que deciden nuestro sino así lo dicta. Sí me gustaría decir algo; las declaraciones de Ollero son justo lo que pedí el otro día: que los béticos no nos callásemos ante este avasallamiento. Él ha sido el primero en dejar las cosas claras. Ayer fuimos TT una vez más. Y no vería con malos ojos una manifestación contra la LFP y demás. Porque creo que ha llegado el momento de subir de nivel.


¡¡Un saludo!!

@josearquer95
@lajuezaesbetica

lunes, 23 de febrero de 2015

A todos esos

Antes de comenzar con el tema de hoy, y para que ningún tipo de sospecha pueda recaer sobre mi persona por las líneas que van a leer a continuación, me gustaría expresar mi más sincera condena a todo tipo de violencia doméstica, y mi intenso deseo de que este mal que afecta a nuestra sociedad se erradique cuanto antes. Bien, dicho esto, vamos al lío. Hoy no voy a meterme con Mel o incluso a defenderlo como vengo haciendo últimamente. Ni voy a criticar el mal juego de la primera hora del sábado o a alabar la última media hora.

Mi artículo de hoy va dirigido a esa cuadrilla de sinvergüenzas manipuladores que colapsan el periodismo español (y en especial capitalino) en nuestros días. A todos esos que dicen iniciar cruzadas en pos de la igualdad de todos los equipos. A los que afirman que no están sujetos a patrocinio o influencia alguna, siendo rotundamente falso. A los que niegan venderse a los más poderosos, cuando están subvencionados de forma indiscriminada. A los que tiran la primera piedra cuando están de mugre hasta las cejas. A todos ellos.

Con esas palabras, que a mi parecer quedan a lo sumo escasas y no completan una descripción total de la realidad en que nos encontramos, me refiero a ustedes. Sí, a vosotros. A los sinvergüenzas, caraduras, mentirosos y demás calificativos de diversa índole, que dirigen los informativos de Antena 3. A los becarios que vomitan lo que los mandamases les ordenan en Marca. A demás calaña como Periodista Digital o El Economista. A colectivos hembristas (que no feministas; ojalá fuesen esto último de verdad) que aprovechan la más mínima oportunidad para entrar a saco, en muchas ocasiones por publicidad o conveniencia mediática.

Verán ustedes: en mi carnet del Betis pone que soy el socio número 26.164. No soy ningún comepipas, y me voy a Tajo a tomarme una cerveza, como otros miles de béticos de a pie. Esto supone que me sé y puedo reconocer aproximadamente el noventa por ciento de las canciones que suenan en el Villamarín. No he faltado A NINGÚN partido este año. Y déjenme decirles que ese cántico al que ustedes hacen referencia, al de apoyo a la violencia y a Rubén Castro, LO HE TENIDO QUE CONOCER POR LA PRENSA. Porque, o se ha emitido en ocasiones muy, muy puntuales, o la gente no ha seguido a sus autores, que han sido tres gatos.

Lo digo por las afirmaciones que he leído y escuchado en todos esos medios. TODOS los que he nombrado han aprovechado para crucificar al completo a una afición que ronda el millón de miembros, y para tildarlos de "violentos" o "machistas", por una deplorable canción que han inventado cuatro pinflois. Es simplemente repugnante la generalización que se ha hecho, la culpabilización desmesurada e ilimitada al beticismo. ¿Me explican quién narices se creen ustedes que se han creído para dar ese tipo de noticias, por llamarlas de alguna forma? ¿Quién les ha concedido la facultad de arrogarse la autoridad moral para juzgar de esa manera?

Ya está bien, hombre. Ya está bien. Porque la semana pasada, salía el Betis en portada de Marca, por la sospecha de que un jugador suyo podía estar implicado en un caso de amaños. Y claro, se aprovechaba para echarle toda la responsabilidad al Betis, sin distinguir entre culpables o inocentes. Y estos días, no sólo se han pasado la presunción de inocencia de Rubén Castro por zonas que no puedo escribir en horario infantil, sino que, por una imbecilidad, por una fechoría contra el sentido común y el buen gusto cometida por un grupúsculo casi insignificante, se nos acusa y se nos señala con el dedo a todos. A los treinta y tantos mil que vamos al estadio cada semana. Y no me da la gana, oye.

Cómo conviene acordarse del Betis sólo en estas ocasiones... Porque el "Cristiano es un borracho" tardó semanas en sancionarse. Porque en el Santiago Bernabéu parece simplemente que nunca pasa nada. Total, como ni siquiera cantan... Porque TODAS las semanas, sin excepción, aparecen las aficiones de Betis y Sevilla, (incluso si juegan fuera) señaladas en las actas de la mamarrachada esta que ha inventado Tebas. Y no me creo que sólo los SGS y los Biris digan barbaridades de entre todos los grupos en España. Porque parece que el Betis sólo le importa a los que dan las noticias si pasa algo de esto. Si no, para qué vais a molestaros ni siquiera en mencionarnos, ¿no?

Señor Tebas, señores manipuladores, y demás aprovechados: entiendo que teniendo en Madrid y Barcelona equipos cuasi putrefactos, donde los estadios están copados de turistas japoneses que no han visto fútbol en su vida, no tengan ni puñetera idea de lo que es una afición, y de lo que es el sentimiento en el fútbol. Y creánme que simpatizo muy, muy poquito con los ultras del Betis, y menos aún con los maltratadores o violentos. Pero creánme que no voy a quedarme haciendo el parguela y aceptando que nos sigan lloviendo las mentiras. Yo no me voy a callar. ¿Y vosotros?


¡¡Un saludo!!


@josearquer95
@lajuezaesbetica

miércoles, 18 de febrero de 2015

Por la boca muere el pez

Enlazo este artículo con el de la semana pasada, ya que nada parece haber cambiado lo más mínimo en lo que al mundo bético se refiere. Siete días después, otro empate a nada contra un equipo de la nada (con todos mis respetos, pero ni el Albacete ni la Ponferradina se encuentran entre los que a priori son "nuestra liga"), otro error arbitral clamoroso contra el que tampoco podemos hacer nada, un equipo que ahora mismo no juega a nada y un banquillo en el que no existe ni el más leve indicio de recapacitación.

Y menciono el post anterior ya que parece que me toca seguir "defendiendo" a Mel, entre comillas. Porque este nuevo tortazo en la casa de un conjunto inferior acrecienta una vez más el clamor de un sector de la afición que pide la cabeza (enorme cabeza por otra parte) del madrileño. Y me vuelve a tocar a mí decir que es verdad que los últimos partidos harían vomitar a una cabra (en sentido futbolístico), así como cada vez nos alejamos más de lo que por obligación debe ser nuestra posición a final de temporada. Sin embargo, el destituir a Mel ahora podría ser un torpedo de considerables dimensiones en la línea de flotación del club, y, como él dice, aún hay un amplio margen de mejora.

Y por seguir conectando con opiniones pasadas, que me ha dado hoy por ahí, podemos hablar de hándicaps. Y existe a día de hoy un obstáculo, un hándicap que cada día me dificulta más la tarea de defender al entrenador. Este elemento son las declaraciones casi circenses en las ruedas de prensa anteriores y posteriores a los partidos. Porque semanas atrás eran las excusas, el echarle la culpa a otros o incluso el poner el parche antes que la herida, el por si acaso nos crujen. Pero lo de estos últimos días ya ha sido de traca.

¿Por dónde empezar? Hay material de sobra para realizar nuestra elección. A ver, querido mío de mi alma: no puedes tener la poquísima vergüenza de decir que el Betis mereció ganar en Albacete, o que dominó el encuentro. Aunque nos robaran un gol y un penalti. Más que nada porque es rotundamente falso, porque se vio la versión light del bochorno numantino y porque, de no ser por Adán, habrías incluso empeorado (y esto es objetivo) los números de Velázquez, lo cual era harto complicado. Y menos puedes escudarte en la catastrófica actuación arbitral para tapar tus vergüenzas. Aunque esta sea real.

Querido, no puedes decir que "el acertar o no acertar en las alineaciones es algo opinable" cuando te has cargado de un partido a otro a los dos tíos que mejor funcionaban, como es el caso de Dani Pacheco y Jorge Molina. No puedes jugar con dos delanteros de inicio y con dos mediapuntas en las bandas, más que nada porque carece de toda lógica y sentido. No tienes la legitimidad suficiente para afirmar que "a lo mejor falta alguien en la parcela creativa" cuando por fin se te ha dado poder y decisión en el ámbito de los fichajes, que era lo que más querías. Y es indignante el decir que "no tengo ninguna preocupación", ya que solo con observar una mijita la imagen del equipo te das cuenta de que algo hay para preocuparse.

Y lo peor de todo: no puedes tener la cara tan granítica de soltar que te vas satisfecho con el rendimiento del equipo. Porque el Numancia casi te saca los colores, porque no quisiste hacer sangre con el Sabadell, porque se vio una falta de ambición vergonzosa con la Ponferradina que acabó costándonos muy cara, y porque volvimos a darnos el tortazo en Albacete. Porque puedes asumir las culpas, puedes suavizar los fallos, etc., eso es admisible. Pero pasar como buena la pasividad, la falta de ambición la poca sangre y me atrevería a decir casi la inanición de los jugadores de los que dependemos, de verdad que no lo soporto. Más que nada porque esos caracteres son los que, a gran escala entendidos, han provocado que estemos como estemos. En Segunda, por si a alguien se le olvida.

Si pierdes o te dejas empatar de forma absurda más partidos, probablemente irás sufriendo una notable pérdida de adeptos, aunque esto, teniendo en cuenta que la irracionalidad es el signo de identidad del maltrecho beticismo actual, tampoco es tan seguro. Pero te puedes caer del pedestal de mármol en el que vives ajeno a los problemas de los mortales, Pepito. Y como sigas haciendo el ridículo y dejándonos a la altura del betún delante de los micros, voy a ser yo el que empiece a pedir que, como se suele decir, cojas tus cuchillos y te pires.


¡¡Un saludo!!

@josearquer95
@lajuezaesbetica

miércoles, 11 de febrero de 2015

El mundo al revés

Antes de dejar de leer el post y proceder a tacharme de oportunista, demagogo y esas cosas que soléis decir el escuadrón de defensa del escritor, les recomiendo encarecidamente (y no porque lo haya escrito yo) que le echen un vistazo al completo, ya que pueden llevarse alguna que otra sorpresa. Hoy trataré ese ámbito tan escaso y casi circunstancial en el Betis, llamado coherencia.

Como ya hice la semana pasada, y por exaltar el frikismo que me caracteriza en cuanto a esta cuestión, hago un pequeño inciso para filosofar, por así decirlo, del término "coherencia". Dice la RAE, de nuevo en su segunda definición: "Actitud lógica y consecuente con una posición anterior". Somos mucho los futboleros, y en especial los béticos, de contradecirnos y de violar una y otra vez el significado de este bonito palabro. Los béticos somos incoherentes por definición, casi por naturaleza, si me apuran. Y observen una cosa: los que pertenecemos al Betis somos incoherentes hasta cuando debemos, por deber moral y ético, ser coherentes. Me explico.

Si han estado atentos a los últimos partidos del Betis, sabrán ya sobradamente que los resultados, y en especial las sensaciones que nos ha dejado el equipo, no han sido buenas. El Betis se atasca, no sabe reaccionar con un resultado en contra y pierde el tono del partido (véase Numancia) o no posee ni el más mínimo ápice de ambición y ganas de comerse al rival, y por inocentones y cándidos, nos empatan al final del partido (véase Ponferradina). El máximo responsable de los números de un equipo es el entrenador; creo que eso está bastante claro. Y aquí volvemos al antagonismo de siempre. ¿O no?

Pues parece que ese dualismo de posiciones respecto de Pepe Mel se ha visto (de forma leve, eso sí) modificado. Permítanme antes de nada excluir a los defensores y opositores más exacerbados, a ellos no se les aplica. Los melistas han venido, en el último año, criticando a todo entrenador que no fuese el madrileño por el simple hecho precisamente de no serlo. No se le ha dado tiempo ni plazo de trabajo a otros entrenadores, y se ha crucificado de forma exagerada y casi irracional. Pues bien, estoy observando un cambio de tendencia. Cada vez son más los defensores de Mel que empiezan a darse cuenta de sus cagadas (en su mayoría más que obvias), precisamente, para ser coherentes con la actitud que anteriormente mantenían con los Velázquez, Calderón y cía, y las señalan sin ningún tipo de complejo, a pesar del cafreo al que muchas veces los sometemos (craso error bajo mi parecer) los antimelistas.

No es este el único aspecto extraño a ojos del bético que sabe más o menos de qué va la cosa. Hay personas que llevan pidiendo la cabeza del escritor desde el día en que pisó Sevilla, y en estas últimas semanas, los resultados y el malestar con el equipo han reforzado esta postura, hasta el punto de estar ya exigiendo la vuelta de Merino (sobre todo por temas de actitud). Y cuando parecía que era el momento ideal para que los detractores del mismo nos sumásemos a esa corriente, somos nosotros los que defendemos a Mel. Yo no creo que haya que destituirlo, o por lo menos, no todavía. Es verdad que la pasividad y la absoluta falta de reacción han sido culpa suya, y que por más que nos quejemos amargamente, seguirá sin hacer bien un cambio o un planteamiento. Sin embargo, también está ahí la intensidad y la épica en el Molinón, y el cambio de imagen y de juego en muchos minutos. Por tanto, para ser coherente con mi actitud de defender a los otros entrenadores que no eran Mel, dentro de lo razonable, ahora me veo sujeto a dicha postura.

Con esto nos encontramos una situación cuanto menos peculiar. Y debo reconocer que me agrada este afloramiento de espíritu crítico en ambos bandos, siempre es positivo que aparezcan factores como estos, sobre todo para la evolución del equipo. Y sobre todo, me alegra que muchos (no todos) seamos coherentes, aunque eso suponga retractarnos de lo defendido en tiempos pasados, u ocupar el puesto del que antes poníamos a parir, y dejar el Betis, nuestro mundo, totalmente al revés.

¡¡Un saludo!!

@josearquer95
@lajuezaesbetica




martes, 3 de febrero de 2015

Hándicaps

Dice la RAE del término hándicap, que da nombre al título del artículo de hoy, en su segunda definición: Circunstancia desfavorable o desventaja. Un hándicap es, en definitiva, un elemento perjudicial que es menester superar a la hora de acometer una empresa. Hoy vengo a hablarles de la aplicación de este anglicanismo al ámbito del Real Betis Balompié. Es una idea que ya llevaba (yo y otros muchos) rondando en mi cabeza, pero que parece confirmarse con rotundidad con el paso de las jornadas.

Como introducción, permítanme que les sugiera hacer un pequeño ejercicio de memoria: ¿cuántas remontadas y partidos épicos recuerdan de los vecinos de Nervión? Innumerables, ¿eh? ¿Cuántas veces han pensado "ojalá hiciera estas cosas el Betis"? Dichos encuentros vienen a nuestra mente casi de forma inmediata. Ahora bien, en lo que nos concierne a nosotros: quitando el 2-1 al Valencia y el derbi del Beñatazo, ¿recuerdan alguna otra remontada épica del Betis? Voy a ofrecerles un dato de Beticismo.net, referido a la campaña 2012-13: sólo el 2% de los partidos totales acabaron en remontada con victoria. Para ganar, casi siempre tuvimos que meter nosotros primero. Es una cifra, cuanto menos, preocupante.

¿Qué le pasa a este Betis de Mel?¿Le da vergüenza remontar?¿Hay una conjura de los astros para que no exista la más mínima reacción en estos casos? Pues no. El hándicap, la desventaja a superar que tiene este Betis a la hora de darle la vuelta a la tortilla se llama Pepe Mel. El escritor ha sabido darle otra imagen al equipo en el último mes, y es cierto que la plantilla y el juego son otros. Sin embargo, existe un aspecto que yo ya entiendo como inherente al madrileño: no tiene ni puñetera idea de hacer un cambio. No sabe reaccionar ante la adversidad. Como me dijo ayer un tuitero sobre este tema, mientras que otros entrenadores se desgañitarían en la banda, Mel, por no hacer, ni siquiera se tomó un Pistolín.

Ya venía guardándose las espaldas (y no sólo el, a lo suyo ya estoy acostumbrado; me preocupó más ver esa actitud que tan poquito soporto en algunos jugadores), advirtiendo del frío, del mal estado del terreno de juego... Lo típico, vaya. Pero, cuando comienza la segunda parte en Los Pajaritos, y al Betis casi se le va de las manos el partido (recordemos que al Numancia le anularon un gol), la inopia cubrió de forma casi absoluta el banquillo bético. Y no sólo por inacción, sino también por torpeza o incompetencia la lió Mel. ¿Cómo, jugándote el liderato y empatando, metes a un medio defensivo por uno ofensivo, alma de cántaro?¿Cómo es que haces todos los cambios y no dejas a nadie que pueda crear algo de juego? La consecuencia más explícita de esto es que el Betis ni siquiera tiró a puerta en esa segunda mitad. Tristísimo.

Lo peor de todo es que existen antecedentes inmediatos. ¿Qué pasó en Alcorcón?¿Te vuelves a estar jugando algo importante, vas empate a cero y tienes un jugador más? Nada, hombre, no pasa nada. Hago cambios de hombre por hombre y ni toco una coma del planteamiento. ¿Resultado? El partido más aburrido del año (o casi) y un empate que supo a muy poco. No sólo me molesta el tema cambios, aunque es un tema en el que me interesa entrar. ¿Por qué, siendo en casa y teniendo un tío más, no se le clavan ocho al Sabadell?¿Por qué se entiende como bueno el empate en Soria y Alcorcón, y no se va a por los tres puntos?¿Incapacidad, miedo, cobardía...? No lo entiendo. Sólo digo que es la misma actitud pasiva que venimos denunciando algunos, que me repugna e demasía y que no lleva a ninguna parte.

Ya sé que los melistas profundos me tacharán de hipócrita, de demagogo, de oportunista y casi de "deztruhtó", como dije la semana pasada. Que cada uno diga lo que quiera. Eso sí: al igual que nos contrarios al escritor hemos reconocido su labor en general en estas últimas semanas, cada vez veo a más fieles a Mel que hacen un pelín de autocrítica, y se meten con él por el tema de los cambios o reconocen su nefasto papel en la planificación del año pasado. Espero que aumenten estos casos. Sea como sea, y con toda la exigencia y la actitud de comerte al rival que sean posibles dentro de los límites de lo legal y lo ético, siempre nos irá mejor.

¡¡Un saludo!!

@josearquer95
@lajuezaesbetica